¿ Alguna vez han sentido que hay amores que no se explican, que simplemente
¿Pasan? Así, sin lógica, sin aviso. Y aunque el tiempo intente alejarlos o el orgullo
quiera callarlos, el corazón no olvida. Porque cuando algo es para uno... Aunque se
pierde por un rato, la vida tiene formas misteriosas de devolverlo.
Hoy quiero hablarles desde esa emoción que remueve el alma. Desde ese impulso que a veces nos lleva a escribirle a alguien cuando no deberíamos, a confesar lo que sentimos, aunque no sepamos si nos responderán. A veces nos da miedo parecer intensas, locas, vulnerables. Pero... ¿no es eso lo más humano que tenemos?
No me arrepiento de haber expresado lo que sentía. Aunque no fue correspondido como esperaba. Porque en cada palabra fui auténtica. Y eso vale más que mil respuestas tibias.
Nos enseñan a callar, a esperar que sea el otro quien dé el paso, a esconder las emociones como si fueran debilidades. Pero yo les digo: sentir no es un error. Amar, aunque duela, aunque no vuelva... es un acto de valentía.
Y si hoy están leyendo esto sintiéndose igual de perdidos, igual de expuestos, igual de enamorados de un recuerdo... sepan que no están solos. Yo también estoy aquí, entre suspiros y letras, aprendiendo a soltar sin dejar de amar. Como una loba romántica que, aunque aúlla en silencio, nunca deja de creer en la magia del amor verdadero.
La loba romántica.

Comentarios
Publicar un comentario